Los indicadores que miden la evolución de los despachos de insumos al mercado interno mostraron que durante agosto se tomaron un respiro, al tiempo que el Índice Construya (IC) adelantó que durante septiembre las entregas de las empresas del Grupo volvieron a impulsarse. Múltiples factores están influyendo en el proceso de recuperación postcierre masivo verificado en la 2º quincena de marzo y en abril, por ello el mismo no es lineal. Entre los factores principales encontramos la evolución de las restricciones asociadas a lo que denominamos como ‘cuarentena’ (marchas y contramarchas); la reposición de existencias vendidas por parte del canal comercial durante el cierre masivo; la búsqueda de refugio en ciertos tipos de materiales que cotizan en moneda dura como forma de resguardar el capital de trabajo frente al creciente nivel de incertidumbre sobre el futuro también para el canal comercial; la recomposición de la demanda de materiales por parte de familias para refacciones y obras chicas (donde participa el cuentapropismo y la ‘autoconstrucción’), motorizada por la oportunidad que plantean el precio del dólar ‘libre’ y la tasa de interés que pagan las colocaciones en pesos a plazo, que se ubica por debajo de la tasa de inflación esperada; y eventualmente también podría estar influyendo la reaparición de la demanda de materiales para acopio por parte de empresas constructoras con proyectos en marcha o próximos a ponerse en ejecución.
El Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción (ISAC) exhibió una caída de 1,0% mensual desestacionalizada, luego de la significativa recuperación observada durante mayo-julio. Los rebotes habían sido de 113,4% en mayo, 41,7% en junio y 4,5% en julio. Con estos guarismos, el ISAC quedó ubicado 0,5% por debajo del nivel alcanzado en febrero de 2020, mes previo al inicio de la cuarentena.
La cuarentena se sumó al proceso recesivo que ya atravesaban la economía argentina en general y la inversión en construcción en particular desde 2018. De esta forma, los despachos de insumos de agosto de 2020 cumplieron dos años en contracción (interanual) ininterrumpida y resultaron 27,1% menores a los registrados en diciembre de 2017, período en el que el ISAC desestacionalizado alcanzó el máximo histórico.
Pero, en septiembre el Índice Construya (IC) volvió a recuperarse, en esta oportunidad a un ritmo de 3,8% mensual desestacionalizado. Esto hizo que el nivel de los despachos de los insumos de las empresas del Grupo resultaran 23,7% mayores a las de febrero del corriente año. No obstante lo cual, y en línea con el ISAC (aunque más moderada), cuando se contrasta con el máximo histórico (noviembre de 2017) el IC desestacionalizado acumuló una retracción de 12,7%.
La desagregación del ISAC permite observar que el ‘respiro’ del nivel general entre julio y agosto fue producto de comportamientos muy disímiles según insumos. Tal como se puede observar en el siguiente gráfico, los despachos desestacionalizados de siete insumos continuaron recuperándose durante el octavo mes del año: mosaicos graníticos y calcáreos (9,3%), asfalto (8,0%), cemento Portland (7,2%), ladrillos huecos (3,6%), placas de yeso (3,3%), hormigón elaborado (2,8%) y pinturas para construcción (1,1%). Por su parte, las entregas de artículos sanitarios de cerámica retrocedieron 4,8%, las de hierro redondo y acero para construcción, 8,7%, las de pisos y revestimientos cerámicos, 10,7%, las de cales, 12,5%, las de yeso, 13,9%, y finalmente, los envíos al mercado del agregado ‘vidrio plano para construcción, tubos de acero sin costura y grifería’ exhibieron una contracción de 15,2% en relación a julio.
Más vinculado a la dinámica de las obras públicas y a las obras privadas medianas y grandes de los principales centros urbanos del país, en los últimos meses el número de puestos de trabajo ocupados en la construcción se mantuvo en un nivel muy bajo (la serie se estabilizó a partir de abril). En el caso de la evolución de esta serie, relevada por el IERIC, influyó de manera principal la evolución de lo que denominamos como ‘cuarentena’, que ubicó a estas obras como no esenciales, al tiempo que en el caso de las obras públicas, se sumó también la restricción presupuestaria enfrentada por los diferentes niveles de gobierno. Con datos a julio, el número de puestos de trabajo registrados fue de 268.181, es decir 1,5% menos que en el mes anterior y 34,4% menos que en julio de 2019 (-140,5 mil puestos de trabajo), quedando 38,0% por debajo del nivel registrado en noviembre de 2017 (-164,6 mil puestos de trabajo).
Finalmente, el organismo oficial de estadísticas volvió a publicar la serie que mide la superficie autorizada a construir en un conjunto de 60 municipios, conociéndose de esta forma la evolución que tuvieron entre marzo y julio de 2020. En abril se autorizaron 74.531 metros cuadrados (m2), en tanto que en mayo se registraron 241,7 mil m2, en junio otros 406 mil m2 y en julio, 426,6 mil m2. En consecuencia, en los primeros siete meses de 2020 se autorizaron 2,82 millones de metros cuadrados en los 60 municipios incluidos en la muestra, es decir 44,6% menos que en igual lapso de 2019 (-2,27 millones de m2) y 43,9% menos que en enero-julio de 2017 (-2,2 millones de m2).
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