Los despachos de insumos continuaron recuperándose durante julio. A la creciente ‘normalización’ de actividades por jurisdicciones, que permitió restablecer de forma gradual la producción de insumos y la distribución al canal comercial, luego de la parálisis de marzo/abril/mayo, en los últimos meses se sumó además un aumento de la demanda de insumos por cobertura (en el caso del canal comercial, en la búsqueda por mantener el capital de trabajo) y para realizar obras chicas y refacciones y obras medianas en menor medida (en el caso de las familias e inversores, incentivados por la ‘oportunidad’ planteada por suba del dólar ‘libre’ en relación al peso argentino y la tasa de interés de los plazos fijos en pesos negativa en términos reales).
Concretamente, en julio de 2020 el Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción (ISAC), que mide las entregas al mercado interno de los principales insumos para una amplia gama de tipologías de obras, exhibió una suba de 6,8% desestacionalizada con relación a junio. Esta suba se sumó a los rebotes de 113,6% de mayo y 37,5% de junio, quedando las serie corregida por estacionalidad apenas 0,3% por debajo del nivel alcanzado en febrero, último mes de actividad normal previo a la cuarentena.
Puesto en la perspectiva histórica, surge que los despachos mensuales medidos a través del ISAC resultaron 26,4% inferiores a los verificados en diciembre de 2017, mes en que el ISAC desestacionalizado alcanzó el máximo histórico.
La serie del ISAC con estacionalidad registró la 23º caída consecutiva al comparar julio de 2020 con julio de 2019. En esta ocasión, la contracción fue de 12,9%, quedando la baja acumulada en los primeros siete meses del año en 34,0% anual.
En tanto, en agosto el Índice Construya (IC) se tomó un respiro, luego de los importantes rebotes observados entre mayo y julio. La serie sin estacionalidad del IC registró una caída de 11,3% con relación a julio. Aun así, el IC quedó ubicado 19,2% por arriba del nivel de febrero del corriente año. Por su parte, la caída con respecto al máximo de noviembre de 2017 se ubicó en 15,9%.
El gráfico precedente muestra que los envíos al mercado del agregado ‘vidrio plano para construcción, tubos de acero sin costura y grifería’ (que incluye las obras petroleras) se acomodaron en julio, al registrar un retroceso de 19% mensual desestacionalizado, luego de haber mostrado en junio el mayor rebote de todos los insumos incluidos en el ISAC (estos despachos se habían duplicado con respecto a mayo). En los demás casos, hubo recuperaciones generalizadas, si bien también con ritmos muy diferentes, explicados en gran medida por el contexto general de restricciones que se vienen enfrentando. Entre junio y julio fueron yeso, asfalto, mosaicos graníticos y calcáreos, cales, artículos sanitarios de cerámica, pisos y revestimientos cerámicos, hierro redondo y acero para construcción y ladrillos huecos, los más dinámicos, con alzas entre 37,3% y 10,2% mensual, respectivamente.
En el caso del cemento Portland, el volumen total despachado fue de 862,7 mil toneladas en el séptimo mes del año y en relación a junio exhibió una mejora de sólo 0,8% mensual desestacionalizada. Mientras la bolsa continuó traccionando, con 641,7 mil toneladas, el granel siguió retrocediendo (221,0 mil toneladas).
Al comparar los despachos al mercado interno de julio con los de febrero del corriente año (en términos desestacionalizados), surge que ya ocho grupos de insumos integrantes del ISAC lograron mostrar variaciones positivas. Hacemos referencia a cales, ladrillos huecos, artículos sanitarios de cerámica, pinturas para construcción, pisos y revestimientos cerámicos, hierro redondo y acero para construcción, placas de yeso y asfalto.
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